Los fabricantes de automóviles pioneros ya están utilizando una serie de fibras naturales en la producción actual de automóviles. Estos materiales sostenibles se usan para reforzar plásticos, producir espuma y reemplazar materiales nocivos como fibra de vidrio o materiales a base de aceite; Algunos ejemplos son espuma de soja, paja de trigo, fibra de kenaf, fibra de coco y cáscaras de arroz. También se está explorando la posibilidad de utilizar las sobras de fibras vegetales de ágave de la producción de tequila para producir piezas bioplásticas más sostenibles, como arneses de cableado, unidades HVAC y contenedores de almacenamiento. José Cuervo está re-utilizando los componentes de las 200-300 toneladas de agave que el distribuidor de tequila cosecha diariamente. También se está investigando la viabilidad del uso de bambú y algas de rápido crecimiento para aplicaciones en interiores. El bambú madura en unos 2-5 años, es compostable y tiene una resistencia a la tracción como la del acero.
Otro concepto revolucionario, originario de la experta en artículos de cuero Carmen Hijosa, es hacer ante falso con fibra extraída de las hojas de piña. Piñatex ™ utiliza 25 millones de toneladas de hojas de piña cosechadas cada año y representa una cuarta parte del peso del cuero real a dos tercios del precio. De lo contrario, las hojas se quemarían o se pudrirían y su conversión en un textil no tejido puede generar ingresos para los agricultores y convertirse en una industria nueva e innovadora para los países productores de piña. Piñatex se usa actualmente para hacer zapatos, bolsos y ropa, pero también se ha usado para fabricar alfombrillas en los automóviles y los fabricantes buscan usar la alternativa de cuero para tapizar el automóvil, especialmente los asientos.