El primer requisito a la hora de comprar unos neumáticos nuevos es que sean compatibles con tu vehículo. El manual y la documentación del propietario incluyen un listado de tipos de neumáticos compatibles. Además, puedes ver las características clave de los neumáticos en el flanco. Mira qué neumáticos tiene ahora tu coche y utiliza ese dato como punto de partida.

Recomendamos encarecidamente utilizar los mismos neumáticos en cada llanta. Esta consistencia es fundamental para mantener el rendimiento del vehículo y tu control sobre este.

El tamaño de los neumáticos se indica en ancho, en diámetro y en alto por ancho. El ancho es un número de tres cifras que mide el número de milímetros que hay entre ambos flancos (1). La relación de alto por ancho es un porcentaje de dos o tres cifras de la altura respecto a la anchura (2). El diámetro, expresado en pulgadas, debe corresponder con el tamaño de las llantas de tu vehículo (4).

La fabricación de los neumáticos puede también variar, y viene indicada mediante la letra R (3). Hasta los años 70 del siglo pasado, los neumáticos diagonales eran los más comunes; tienen una cubierta fabricada con lonas de cima cauchutadas con bordes enrollados alrededor del alambre coarrugado. En la ingeniería automovilística moderna, el neumático radial ha desbancado al diagonal. Los cables de la cubierta del neumático radial son perpendiculares a la dirección de la marcha. Visto desde un lado, los cables discurren de forma radial, de ahí el nombre del neumático.

Los neumáticos deben ser capaces de soportar la carga del vehículo; dicha capacidad se denomina índice de carga. Mira dicho índice para determinar el peso y luego multiplícalo por el número de neumáticos para calcular la carga total soportada.

El índice de velocidad, expresado con una letra en el flanco (5), es la velocidad máxima que puede soportar el neumático. Ten en cuenta que el perfil de los neumáticos que soportan más velocidad tiende a desgastarse más rápido. El índice de velocidad tiene que ser, como mínimo, igual que la velocidad máxima del vehículo.

 Además, el fabricante facilita información sobre la presión óptima de los neumáticos para un funcionamiento óptimo del coche. Ten mucho cuidado si llevas al neumático inflado cerca de su presión máxima; afecta al manejo del vehículo e incrementa el desgaste del neumático. La información del fabricante relativa a la presión máxima del neumático se puede encontrar en la tapa del depósito de combustible o en el marco de la puerta.

Asegúrate de mirar el flanco para obtener más información como, por ejemplo, el tamaño (6), los códigos de seguridad y los iconos de asociación. Indican si está aprobado en tu país y si cumple la normativa común de calidad.

En conjunto, los requisitos clave a la hora de elegir neumáticos reducen la selección. Pero hay muchas otras opciones de neumáticos para turismos. Elegir el neumático adecuado depende de tu forma de conducir y de tu presupuesto.

¿Buscas una conducción tranquila y confortable? Los neumáticos de esta categoría tienen un perfil diseñado para minimizar el ruido. Pero el caucho del perfil puede ser más suave, lo que aumenta el índice de desgaste. Por lo tanto, los neumáticos silenciosos son los idóneos para carreteras asfaltadas.

O, ¿puede ser que busques unos neumáticos que supongan un mayor ahorro de combustible? Estos neumáticos tienen un perfil con una resistencia de rodadura inferior, lo que supone un ahorro de combustible bastante mayor.

Si conduces en carreteras sin asfaltar o te gusta conducir campo a través, la versatilidad de los neumáticos es fundamental. Los neumáticos todoterreno te pueden valer. O es posible que consideres la posibilidad de tener un plus de protección en los flancos que ofrecen los neumáticos off-road. Muchos neumáticos especiales para camiones, como los neumáticos para el barro, ofrecen una mayor tracción en diversos terrenos.

Por último, hay que tener en cuenta que los distintos tipos de neumáticos ofrecen un manejo distinto. Tómate tu tiempo para adaptarte a conducir, acelerar y frenar con neumáticos nuevos.

Las condiciones de conducción varían a lo largo del año. Por lo que, cuando llegue el momento de comprar neumáticos nuevos, lo primero que debes hacer es considerar el clima donde vives. Dependiendo del clima de tu región, puede ser mejor alternar entre un juego de neumáticos de verano y de invierno, o podría ser suficiente quedarse con neumáticos para todas las estaciones.

Los neumáticos de invierno tienen un dibujo de la banda de rodadura diseñado para ser efectivos en nieve y aguanieve y son capaces de soportar temperaturas bajo cero. Lo que es más importante, ofrecen un manejo mejorado y distancias de frenado más cortas sobre nieve y hielo.

Los neumáticos de verano ofrecen un excelente agarre en carretera, manejo y distancias de frenado más cortas en carreteras secas y también son capaces de manejar carreteras resbaladizas después de fuertes lluvias.

Los neumáticos Continental para todas las estaciones funcionan en una variedad de condiciones. Para los conductores que viven en regiones con condiciones invernales suaves (las temperaturas rara vez descienden por debajo del punto de congelación), los neumáticos para todas las estaciones pueden ser una alternativa. Los neumáticos Continental para todas las estaciones ofrecen seguridad y un rendimiento superior. Además, los conductores pueden ahorrar costos, tiempo y reducir los esfuerzos necesarios para los cambios de neumáticos estacionales.

Si no estás seguro de la elección correcta de neumáticos, contacta con tu distribuidor local para obtener asesoramiento personal.